Fina Espinosa, educadora social municipal; Joan Valls, educador social del CIJP.
Durante el curso 1995-1996 el educador social del EBASP de Santa Eugènia de Ter, dependiente del ayuntamiento de Girona, y los educadores del Centro Abierto iniciado aquel curso por el Centro infantil y juvenil parroquial Santa Eugènia (CIJP) coincidieron en la constatación de que un grupo importante de jóvenes de los barrios de Santa Eugènia y Can Gibert del Pla necesitaban un servicio que los ayudara en la compleja tarea de buscar un trabajo.
En aquel momento parecía importante no duplicar esfuerzos ni servicios y crear conjuntamente este recurso. Durante aquel curso se diseñó el proyecto que empezó en septiembre de 1996. Funcionaba en colaboración entre el Ayuntamiento de Girona y el CIPJ, y se adoptó un sistema de trabajo que englobaba la necesidad de trabajar en red los agentes que operan en un mismo territorio, conjuntamente desde el análisis, la conceptualización y la realización del proyecto, con los mismos instrumentos y buscando la misma finalidad.
A partir del seguimiento y conocimiento de muchos jóvenes, se detectó que había jóvenes del sector a los cuales, además del acompañamiento hacia los recursos de inserción en los aspectos técnicos, les hacía falta una mediación y un apoyo más educativo para conseguir esta inserción.
Por lo tanto, parecía importante trabajar los aspectos más relacionales y personales.
El Fem feina (Trabajamos) nace como un servicio para jóvenes de entre 16 y 25 años, con un nivel de formación bajo y con poca capacitación para encontrar y mantener el trabajo; parados; en situación de riesgo, y/o con dificultades para salir de la pobreza o de cierta marginalidad. Con el paso del tiempo, un grupo que ha adquirido una importancia cuantitativa en el servicio han sido los jóvenes procedentes de colectivos inmigrantes.
Los jóvenes llegan al proyecto derivados por el mismo EBASP del territorio y de los chicos y chicas con los que se ha trabajado en el CIJP desde los centros abiertos o desde el centro juvenil. También se mantiene un contacto constante con el IES Santa Eugènia con el que se afronta conjuntamente la situación de los jóvenes absentistas que llegan a los 16 años o de aquellos otros que acaban ESO pero no lo acreditan. La inmediatez de las actuaciones ayuda a evitar que muchas situaciones se deterioren. También se han trabajado algunos casos derivados de Cáritas Parroquial. Por otro lado, el servicio es bastante conocido entre los jóvenes del barrio, cuyas informaciones motivan a muchos otros a contactar con el Fem feina.
El proyecto alcanza los barrios de Santa Eugènia de Ter y Can Gibert del Pla que, en estos momentos, tienen una población cercana a los 16.000 habitantes. Cabe remarcar que estos barrios han tenido un incremento de población muy grande y que han sido los territorios de la ciudad de Girona que más población inmigrada han acogido; en estos momentos tienen un 17% de población inmigrada censada.
El proyecto nace con una finalidad muy clara: favorecer la inserción social y laboral de los jóvenes descritos en el apartado anterior, promoviendo recursos cercanos y mediadores que se sitúen entre las necesidades de un colectivo importante de jóvenes que no acostumbran a llegar a los circuitos normalizados laborales o que tienen grandes dificultades para hacerlo. Para conseguirlo se plantean estos circuitos:
El servicio es atendido por dos educadores sociales: un educador del CIJP y la educadora del EBASP. El tiempo de atención incluye los miércoles y jueves, de 9 a 13 horas. También se hacen otras entrevistas o intervenciones concertadas en otros momentos. Se lleva a cabo en los locales del Centro Cívico Municipal Santa Eugènia y en los del Centro Juvenil del CIPJ. La infraestructura y el material utilizados provienen de las dos entidades que lo promueven.
Todos los jóvenes del sector descrito anteriormente pueden participar en el nivel de acogida, donde también se atiende a un buen grupo de adultos que buscan empleo. A partir del primer contacto, se forman los “Grupos Fem feina“, formados por unas 50 personas cada uno, con los que se realiza un seguimiento detallado. A lo largo de estos años se han creado 8 grupos Fem feina y se ha atendido, aproximadamente, a unos 400 jóvenes de manera continuada. También hemos atendido a un grupo de unas 300 personas de manera más puntual. En algunos casos también se hace un seguimiento más distanciado de los jóvenes que ya han dejado el Fem feina, especialmente por parte de la educadora social municipal.
El plan de trabajo normalmente es individualizado y las diversas fases que desarrolla nuestro servicio se llevan a cabo según el momento de llegada de los jóvenes al servicio. También se hacen algunas sesiones grupales en el caso que esto sea necesario. Es el que presentamos a continuación. Únicamente queremos remarcar que cuando hablamos del DIE nos estamos refiriendo al Dispositivo de Inserción Económica del Ayuntamiento de Girona, que realiza las tareas de diagnosis y con el que tenemos una especial relación y realizamos conjuntamente algunas de las acciones de inserción laboral.
Es el momento de la toma de contacto entre los jóvenes parados, de los barrios de Santa Eugènia y Can Gibert, y el proyecto Fem feina.
Para llevar a cabo estos objetivos tendremos como mínimo dos entrevistas.
Entrevista de presentación:
Entrevista de constitución del grupo Fem feina:
Entre estas dos entrevistas, y dependiendo de la temporalidad, las disponibilidades y la urgencia, puede haber otras entrevistas individuales de apoyo.
Es el momento de conocer con profundidad al joven parado, de hacerle una orientación adecuada y llegar a determinar un plan de trabajo.
Por hacer el diagnóstico entendemos el trabajo de definir los aspectos siguientes de cada persona: formación, experiencia laboral y habilidades, aptitudes, estado físico y psíquico, movilización en la búsqueda de trabajo, motivaciones y disponibilidad, etc.
Por orientar entendemos el trabajo de apoyo en la construcción de un itinerario de inserción socioprofesional.
A medida que se van dando situaciones de los circuitos normalizados de inserción, la orientación también es un apoyo a la capacidad del individuo de proyectar un futuro profesional.
Por concretar un plan de trabajo entendemos llegar a acuerdos concretos sobre las acciones de búsqueda, de formación o de ocupación que tienen que llevar a cabo el joven y las acciones de apoyo que le puede ofrecer el servicio. Intentamos hacerlo bajo la forma de un PEI.
Para llevar a cabo estos objetivos llevaremos a cabo estas acciones:
En esta entrevista también se acordará el tipo de seguimiento a realizar.
Entendemos por seguimiento el conjunto de actuaciones, educativas y técnicas, que se ponen en marcha para garantizar el acompañamiento de cada persona en su itinerario formativo y laboral hacia la inserción en el mundo del trabajo.
El seguimiento será diferente en caso de seguir en un proceso de búsqueda de empleo, en una acción formativa o en una ocupación laboral. También será diferente en los momentos iniciales o una vez que se haya estabilizado en el recurso correspondiente.
Entrevistas individuales:
Su frecuencia se determina en el documento del plan de trabajo individual. Tanto los jóvenes como los educadores pueden pedir las que crean convenientes.
Utilizaremos para cada entrevista un documento de seguimiento donde constan:
Reuniones grupales de seguimiento:
Pueden ser de todo el grupo Fem feina o de grupos más reducidos donde se tengan que plantear propuestas o temáticas concretas. Pueden ser asambleas, reuniones informativas, encuentros con dinámicas concretas.
Para recoger los acuerdos a los cuales se haya llegado utilizaremos el modelo de actas de reuniones, firmado por las dos partes, jóvenes-servicio.
Sesión informativa del técnico de inserción laboral:
En algún momento del seguimiento, para el grupo que se considere oportuno, habrá un encuentro para informar sobre la situación del mercado de trabajo y las posibilidades concretas de los jóvenes de acuerdo con los diagnósticos previos.
Agenda personal de búsqueda:
En el caso que la acción principal sea la búsqueda de empleo utilizaremos la agenda como uno de los medios importantes de seguimiento.
La fase de seguimiento acaba de común acuerdo al haber encontrado un trabajo con suficientes garantías de continuidad o por baja del joven a causa de incumplimientos graves y constantes de los compromisos adquiridos.
Es el momento de evaluar con el joven el cumplimiento de los compromisos, del itinerario y de las perspectivas de cara al futuro.
Para llevar a cabo estos objetivos utilizaremos una entrevista final de evaluación. Para ello utilizaremos la ficha de evaluación que estará compuesta de:
Después de estos 8 años consideramos que el Fem feina ha realizado un buen trabajo. Es un servicio sencillo que rentabiliza mucho las horas de atención que se le dedican. Que aprovecha mucho todos los recursos existentes en la ciudad y que los pone al alcance de muchos jóvenes que, de otra forma, no llegarían. Promueve una educación integral de las personas, no limitada al tema laboral, y que nos permite como educadores hacer un seguimiento importante y un acompañamiento personal de muchos jóvenes en situación de riesgo. Que hace realidad el trabajo en red y bajo la forma de partenariado entre una administración y una entidad de iniciativa social con raíces en el barrio. Es un punto de referencia para muchos jóvenes del barrio, donde acuden cuando se les presenta alguna situación de dificultad. Es un espacio que permite llevar a cabo de una manera muy efectiva la acogida de jóvenes recién llegados inmigrados, con los que afrontamos las absurdas situaciones a las que les llevan las injustas leyes de extranjería vigentes en nuestro país.
También ofrece una continuidad en la tarea educativa efectuada en los mismos servicios sociales o en recursos educativos como el Centro Abierto de adolescentes o el Centro Juvenil. No cabe decir que con más dedicación se podrían ampliar todavía más los servicios que ofrece, incrementando la intensidad del trabajo que realiza y el número de jóvenes atendidos.