Mariona Ribalta, historiadora
No conocí a Toni personalmente, pero he estado estos últimos meses leyendo sus escritos, informes o, sencillamente, las actas de las reuniones de coordinación de los responsables de los Colectivos Infantiles. A través de estas lecturas, pienso que he entendido quién era Toni y las herramientas que quería ofrecer a los niños y niñas del Asil del Port. Algunos lo consiguieron, para otros ya era demasiado tarde.
Pero su formación teórica, su ímpetu, su voluntad de implicar a diversos profesionales en un objetivo común, facilitó la creación de un grupo de personas que, con responsabilidades diferentes, se dedicaron a hacer realidad los Colectivos Infantiles, consiguiendo dar un giro radical a la vida de unos niños que tenían pocas cartas en el juego de la vida.
¡Gracias, Toni!
Mayo, 2010