Esther Gil Pasamontes. Universitat de Barcelona
TÍTULO | 7 retos para la educación social. Reinventarse como profesional de lo social. Nuevos desafíos para la empleabilidad |
AUTORÍA | Anna Forés & Ana Novella, A. (coord.) |
EDITORIAL | Gedisa (Barcelona) |
AÑO | 2013 |
La palabra “reto” tiene la virtud de generar un efecto llamada sobre nuestra atención. Y es eso lo que consigue los autores de este libro, generar curiosidad y expectativas en torno a una seria de retos que tienen un destinatario, la educación social, en tiempos dinámicos, inciertos y complejos. Unos momentos en los cuales: Lo que antes era un proyecto para “toda la vida” hoy se ha convertido en un atributo del momento. Una vez diseñado, el futuro ya no es “para siempre”, sino que necesita ser montado y desmontado continuamente (Bauman, 2008: p. 23-24). Unos tiempos que invitan a reinventarse como profesionales de lo Social.
Freire destacaba que era por medio de la palabra, el trabajo, la acción y la reflexión que se construían las personas y no con los silencios. Nos encontramos delante de una obra con diversas voces, plena de conocimientos y de experiencias que confluyen en el marco de unas conversaciones sobre la realidad profesional de los educadores y las educadoras sociales. Porque es en el marco de unos diálogos con profesionales implicados en la formación de futuros profesionales donde se tejieron los hilos conductores que guíen la lectura de esta obra. Unos hilos que permiten conocer y reconocer cuáles son los retos de la educación social, invitando a los ámbitos académicos y profesionales a la conversación recogiendo los frutos de la misma, de forma coral y poliédrica.
Así pues, nos encontramos con voces que nos hablan en clave de pregunta, de competencia, de oportunidad, de narraciones, de arquitectura y diseño, de humor, de retos y de identidades. Las palabras de Eduard Sala, en el prólogo, transmiten una coherencia tan directa, sin matices y desde una sinceridad tan contundente que dejan poco margen para el comentario. Pero sí al reconocimiento de unas palabras que ejercen el arte de la pregunta sobre las funciones y las responsabilidades de todos los agentes que participan en las prácticas del Grado de Educación Social. Y que, además, nos invita a pensarnos, y dejarnos interpelar por aquellos que tienen una mirada fresca, ingenua y esperanzadora. Porque tal y como destaca el mismo autor «de ello depende poder abordar nuestro papel como agentes de transformación de una realidad que puede ser construida, de una sociedad nueva».
De los saberes de los educadores y educadoras sociales nos hablan Conxita Vila y Montse Freixa, unos saberes en clave de competencia. El recorrido que hacen las autoras parte de ofrecer un espacio a la conceptualización del término competencia, pasando por la identificación de las diferentes competencias que ponen en juego los educadores sociales. Y finalizando en el reconocimiento de las prácticas como un espacio privilegiado que tiene el alumnado para poner en acción todos sus saberes adquiridos gradualmente, y que tiene el tutor/a para acompañarlo en su crecimiento como profesional en lo social.
De acompañamientos y supervisiones nos ilustran Nuria Fabra y Sandra Costa en clave de oportunidad. Y es que, tal como comentan las autoras, el acompañamiento comienza por el reconocimiento del otro y de sus posibilidades hacia un propósito, para lograr promover inquietudes y generar cambios. Un crecimiento que tiene en la supervisión un espacio para la reflexión-acción, el autoanálisis y la formación. ¿Y dónde encontramos la oportunidad? La encontramos en el hecho que las autoras nos ofrecen elementos claves para abordar estos conceptos en los espacios de prácticas, aportando contenidos, instrumentos y metodologías participativas.
De las palabras y narraciones nos hablan Lot Tortajada, Julio Zino y Marta Venceslao en un capítulo donde la arquitectura a la hora de narrar, de construir toma un sentido diferente, un sentido educativo. Los relatos de vida ofrecen un amplio abanico de posibilidades que no podemos obviar. Son herramientas educativas tanto para el educador como para los educandos. Herramientas de autorreflexión, para los educadores, sobre la práctica educativa y su construcción. Y para los educandos porque los reconocen como parte importante del proceso educativo y sus voces y reflexiones son pilares que contribuyen en esta arquitectura de lo educativo.
Se trata de una arquitectura que tiene en los diseños de los proyectos una de sus materializaciones. Y es, sobre la revisión, el diseño de proyectos y la innovación que Artur Parcerisa y Jordi Usurriaga nos ofrecen una radiografía que permite visualizar los elementos claves en el desarrollo de la competencia de planificar y revisar proyectos socioeducativos. Porque hablar de planificación y de diseño implica abrir interrogantes: ¿Qué?, ¿Por qué?, ¿Quién?, ¿Cómo?, ¿Cuándo?, ¿Dónde?, ¿Con quién?…Y al mismo tiempo movilizar e integrar saberes en marcos singulares, dinámicos, complejos e inciertos, abriendo espacios para la construcción reflexiva.
En estas movilizaciones de saberes también juega un papel relevante el sentido del humor y la gestión del estrés. Para Jesús Damià y Nuria Pérez las potencialidades del humor en el día a día del educador social son innegables. Ya que sea porque ayuda a la propia estabilidad emocional o cuidado personal del profesional; porque abre las puertas a la creatividad; porque nos permite dar respuestas positivas a los otros delante de un pesimismo instalado; porque nos ayuda a comprender la realidad desde una mirada más agradable y también, porque nos ayuda a establecer estilos de relación socioeducativa diferentes. Incorporar el humor en el quehacer del educador social se nos plantea como una oportunidad de encarar los retos desde una mirada diferente y positiva.
En clave de retos Araceli Lázaro, Joseba Polanco y Anna Forés nos hacen una reflexión alrededor de la teoría y la práctica de la ocupabilidad del educador social. El recorrido al cual nos invitan parte de las raíces de la profesión del educador social y su relación con el desarrollo de políticas públicas, hasta llegar a los nuevos perfiles profesionales, deteniéndose en el oficio del educador social y en la teoría y práctica de su ocupabilidad. Términos como transparencia, incorporación, colaboración, conocimiento, visibilidad y difusión juegan un papel destacado a la hora de abordar el reto de la ocupabilidad del educador social. Ésta ha de ser flexible, emprendedora, diversificada y generadora de respuestas a las nuevas demandas. En este nuevo escenario deviene necesario desarrollar nuevas capacidades relacionadas con la gestión empresarial y laboral.
Si anteriormente nos invitaban a detenernos en las raíces del educador social, Alfons Martinell y Ana María Novella reflexionan en clave de identidades del educador social haciendo un recorrido alrededor de cómo se han construido estas identidades hasta la actualidad. Un recorrido por el activismo y la movilización que en la actualidad y, con el escenario de desmantelamiento de las bases de la cohesión social y del estado de bienestar, están siendo poco visible. Así también parece que nos hemos perdido en discursos como los recogidos en la película Una noche en la ópera: Haga el favor de poner atención en la primera cláusula porque es muy importante. Dice que… la parte contratante de la primera parte será considerada como la parte contratante de la primera parte. ¿Qué tal, está muy bien, eh?…
Tal como destacan los autores si la identidad profesional del educador social va a estar ligada a la implementación de las políticas sociales y la recuperación democrática, no puede abandonar su rol delante la realidad actual. Intervenir bajo principios de corresponsabilidad, de respeto hacia el otro, de reflexión y formación continuada, devienen requisitos básicos en la construcción de la identidad profesional del educador social.
Para finalizar, cabe destacar que nos encontramos delante una obra que plantea un abanico de propuestas orientadas a encarar los diferentes retos que tiene, en estos momentos, la educación social desde un marco de aprendizaje y diálogo. En definitiva, de ideas propuestas a debates compartidos.
Bauman, Z. (2007). Los retos de la educación en la modernidad líquida. Barcelona: Gedisa.
— (2008) El arte de la vida. De la vida como obra de arte. Barcelona: Paidós.
Freire, P. (2006). Pedagogía de la Autonomía: Saberes Necesarios para la Práctica Educativa. Madrid: Siglo XXI Editores.