Artículo publicado en el nº 16 de la Revista RES, Revista de Educación Social.
Autoria: Marcos García Vidal.
Las relaciones entre los seres humanos conllevan el uso de un determinado modelo de convivencia asociado a determinados valores, formas de organización, formas lingüísticas, modos de expresar los sentimientos, expectativas sociales y educativas, maneras de ejercer el cuidado, sistemas de relación y pautas para afrontar los conflictos, entre otros aspectos (Jares,2008).
En relación al conflicto es importante matizar que, a diferencia de lo que suele creerse, este no es un fenómeno, sino un proceso que se produce tanto a nivel individual como a nivel social.
En el campo educativo, la existencia del conflicto plantea nuevos retos educativos que se unen a los ya existentes. Pero ¿qué tipo de conflictos se producen en las aulas? ¿Cómo se resuelven? ¿Se interiorizan valores en las escuelas?
Mediante un estudio (N=1) realizado en un instituto de educación secundaria acerca de la convivencia en las aulas, el presente trabajo trata de clarificar estas y otras cuestiones relacionadas con los problemas derivados del conflicto en los centros escolares.
Para la obtención de los datos objeto de estudio, se facilitó a los docentes un cuestionario, de tipo Likert, denominado Estudio de la convivencia educacional. A la luz de los resultados obtenidos, se realizan una serie de propuestas sobre la aportación que, desde el ámbito de la Educación Social, podría llevarse a cabo para minimizar la existencia e intensidad de los conflictos y lograr, en fin, una mejor convivencia en nuestras escuelas.