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Diseño de un cuestionario de competencias docentes del profesorado de Formación Profesional de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad

Autoría:

Elena Bujanda Sáinz de Murieta, Escuela Politécnica Navarra

Resumen

El objetivo de este artículo es presentar una herramienta que recoja las competencias docentes en la familia de Formación Profesional Servicios Socioculturales y a la Comunidad. Con este objetivo, un panel de expertos realizó una primera propuesta que fue enviada a todos los centros educativos españoles que imparten formación en esta rama. El personal docente de estos centros realizaron aportaciones basadas en su experiencia que fueron utilizadas para modificar la primera propuesta y elaborar el cuestionario final. El resultado es una herramienta muy útil que sirve tanto para detectar necesidades de formación en el actual equipo docente como para evaluar la idoneidad de los candidatos en un proceso de selección de profesorado. 

Introducción

La Formación Profesional debe ir adaptándose a las necesidades emergentes del mundo laboral. La educación se ve influenciada por los cambios sociales, culturales y científico-tecnológicos que ocurren en nuestra sociedad. Por ello, es imprescindible la formación permanente del profesorado, ya que es un agente clave de los procesos de mejora de la educación. Como afirman Marcelo (2002) y García-Ruiz y Castro (2012), este aprendizaje permanente es una obligación moral para el profesorado, puesto que es una profesión comprometida con el conocimiento.

La formación permanente vinculada al desarrollo del modelo de competencias es muy adecuada para responder a las necesidades actuales y futuras de los docentes.

Aproximación al concepto de competencia

El informe Delors “La Educación encierra un tesoro”, publicado en 1996, ya ponía en relación el aprendizaje con las competencias; estableciendo cuatro pilares básicos de la educación: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser. Por tanto, se reconocía la importancia del aprendizaje de aptitudes, capacidades y competencias para hacer, ser y convivir; además del tradicional aprendizaje cognitivo.

El término competencia ha sido definido por muchos autores, como Gronzci, Mertens, Le Boterf, Bunk, Echeverría… En todas las definiciones podríamos destacar cuatro elementos fundamentales que conforman las competencias:

  • Se trata de características personales que se pueden aprender. 
  • Se aprende, se manifiesta y se perfecciona con la acción; pero es necesaria la reflexión. 
  • Tienen un carácter holístico, la persona funciona como un todo inseparable que es superior y diferente a la suma de atributos individuales. 
  • Consiguen resultados en diferentes contextos.

Definición de competencias docentes

El concepto de competencias docentes ha sido definido por diferentes autores como Comellas (2002), Perrenaud (2004) y Zabala y Arnau (2007). Todos ellos coinciden en destacar la complejidad de las tareas a realizar en contextos específicos y el empleo de habilidades, recursos actitudinales, cognitivos, psicomotores y afectivos.

Zabala y Arnau definen la competencia en el ámbito laboral y educativo como “la capacidad o habilidad de efectuar tareas o hacer frente a situaciones diversas de forma eficaz en un contexto determinado. Y, para ello, es necesario movilizar actitudes, habilidades y conocimientos al mismo tiempo y de forma interrelacionada”.

A pesar de ser el modelo de competencias un enfoque muy adecuado para reflexionar sobre la situación del desarrollo profesional de los docentes y la dirección que debe tomar su formación continua, no ha estado exento de debate. Autores como Kerka (1998) critican, entre otros aspectos, que su conceptualización es confusa y que se ha reducido en muchas ocasiones a la ejecución de tareas simples relacionadas con diversos roles que se desarrollan en un trabajo determinado.

Como respuesta a esta cuestión, podemos tomar cualquiera de las definiciones de competencias expuestas anteriormente o el estudio de Cano (2005) que afirma que las competencias subsumen las inteligencias múltiples y aúnan el conocimiento conceptual, procedimental y actitudinal con sentido global y aplicativo. En este sentido, comprobamos que Kerka reduce el concepto de competencia al saber hacer, cuando en realidad es un término mucho más amplio.

Modelo de competencias docentes

La preocupación por la mejora de la calidad educativa ha existido y existirá siempre, puesto que es fundamental para el desarrollo de las personas y de la sociedad en general; y el profesorado es un agente clave en este proceso. Tradicionalmente el profesorado tenía una función más centrada en la transmisión de conocimientos y destrezas. Sin embargo, actualmente se tiene muy en cuenta el rol de profesor como transmisor de valores y guía del proceso de adquisición de habilidades.

En este contexto, es el modelo de competencias el más adecuado puesto que es un modelo más integrador. Además, expresa una visión proactiva de los centros y del profesorado, que tratan de actuar de cara al futuro. Las competencias se desarrollan a partir de experiencias de aprendizaje en las que conocimientos, habilidades y actitudes interactúan para dar una respuesta eficiente a la tarea que se ejecuta. Este modelo prepara a los docentes para saber actuar en situaciones específicas que ocurren en el contexto escolar, habitualmente complejas y poco predecibles. Estas competencias, como afirma Gairín (2009), tienen dos características fundamentales: el carácter aplicativo de los aprendizajes (una persona es competente cuando es capaz de resolver problemas propios de su ámbito de actuación) y su carácter dinámico (se adquieren y se desarrollan en la acción y se perfeccionan gracias a la misma acción).

El profesorado de la familia de Formación Profesional Servicios Socioculturales y a la Comunidad

El profesorado de la familia de Formación Profesional Servicios Socioculturales y a la Comunidad debe ser titulado en Educación Social, Trabajo Social, Psicología, Pedagogía o Psicopedagogía.

Esta familia está integrada por un ciclo formativo de grado medio (Atención a personas en situación de dependencia) y tres ciclos formativos de Grado Superior (Animación sociocultural y turística, Integración Social, Educación Infantil).

Las cualificaciones profesionales identificadas y expresadas en los perfiles del conjunto de los estudios de Servicios Socioculturales y a la Comunidad responden a las  necesidades de formación en el segmento del trabajo técnico del sector de servicios socioculturales en el área de atención a: menores, personas mayores, mujeres, personas con discapacidad física, psíquica o sensorial, inmigrantes y colectivos socialmente desfavorecidos.

Por las características propias de la Formación Profesional, el docente de Servicios Socioculturales y a la Comunidad tienen tres contextos de actuación diferenciados: el contexto del aula, el contexto del centro educativo y el entorno laboral (las empresas que participan en la Formación en Centros de Trabajo del alumnado).

Trabajo en equipo en Flick

Antecedentes

Existen diferentes estudios en los que se han delimitado las competencias necesarias que deben tener los docentes en diferentes niveles de educación, desde primaria, pasando por secundaria o formación profesional, hasta la universidad.

En este sentido me gustaría destacar estudios como el de García-Ruiz y Castro (2012) que estudia el tema en el profesorado de Educación Infantil y Primaria, Perrenoud (2004) con su decálogo de competencias del profesorado de Primaria, Medina y col. (2011) que trabajan el tema en el ámbito universitario y los planes de formación de Comunidades Autónomas como Castilla y León, Asturias y Murcia en el que se puede ver el listado de competencias docentes para el profesorado de Formación Profesional. Hernández también presenta un instrumento de autoevaluación de competencias docentes en formación profesional.

Sin embargo, tal y como comenta Tejada (2009) en su artículo “Competencias docentes” la diversidad de contextos y escenarios de actuación dan pie a muchos perfiles profesionales diferentes. De ahí, mi interés por concretar las competencias docentes del profesorado de FP de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad.

Para que el profesorado pueda realizar formación continua es necesario un proceso reflexivo en el que se haga consciente de sus fortalezas y sus debilidades, que competencias posee y que competencias necesita mejorar. Por ello, la elaboración de un instrumento que facilite esta reflexión nos parece interesante.

El cuestionario que se pretende diseñar tiene un doble objetivo. Por un lado, la evaluación interna del profesorado, este instrumento puede ser útil para detectar las necesidades de formación tras un proceso de auto-reflexión, a partir del cual  se plantee el proyecto de formación individual.

Y, por otro, posibilita la evaluación  del equipo de profesorado desde una perspectiva externa. Planteada desde los equipos directivos de los centros educativos, puede contribuir a la evaluación de la calidad del profesorado y ayudar a diseñar un plan de formación acorde a las necesidades detectadas. También podría ser útil en la selección de nuevos profesionales.

Por tanto, no se trata de realizar un cuestionario exhaustivo que recoja todas las competencias, sino que sea un instrumento práctico y no excesivamente extenso, que plasme las competencias más importantes y que se pueda utilizar en la práctica diaria, como elemento de reflexión y elemento evaluador para el profesorado.

Objetivos

El objetivo del presente artículo es diseñar un cuestionario que recoja las competencias docentes en la familia de Formación Profesional Servicios Socioculturales y a la Comunidad y conocer la importancia que tienen las diferentes competencias para el profesorado de esta rama de Formación Profesional.

Metodología

Primera fase: Elaboración de una propuesta: construcción del cuestionario provisional de Competencias docentes del profesorado de Formación Profesional de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad.

El primer cuestionario fue elaborado en base a las competencias descritas en el plan de formación de Castilla y León y de Murcia, por tener las competencias categorizadas de una manera sencilla; y completado con diferentes aspectos de otros estudios revisados, entre los que destacan Tejada (2009), Gairín (2009) o García-Ruiz y Castro (2012).

Así, dicho cuestionario provisional contenía ítems agrupados en nueve competencias diferentes:

            – Competencia científica.

            – Competencia intra e interpersonal.

            – Competencia didáctica.

            – Competencia organizativa y de gestión del centro.

            – Competencia en trabajo en equipo.

            – Competencia en innovación y mejora.

            – Competencia lingüístico-comunicativa.

            – Competencia digital (TIC).

            – Competencia social-relacional.

Para cada ítem, las personas expertas debían valorar su pertinencia y su adecuación, en una escala formato Likert de 5 posiciones (Totalmente de acuerdo=5; de acuerdo=4; neutral =3; en desacuerdo=2; totalmente en desacuerdo=1). 

Por último, había un apartado de sugerencias o comentarios para que añadiesen aquellas competencias que no habían sido registradas previamente o cualquier otro comentario que deseasen hacer constar con el fin de mejorar el cuestionario de competencias docentes.

Segunda fase: Validación del cuestionario

Tras diseñar el cuestionario provisional, se procedió a la validación del mismo por panel de expertos, con el fin de evaluar el grado en que el cuestionario representa el contenido que se pretendía valorar. Para ello, se contó con cuatro personas con titulación en Educación Social, Pedagogía, Psicopedagogía y Psicología y una experiencia superior a cinco años como profesoras en esta familia profesional de FP, además, dos de ellas formaban parte del equipo directivo.

En esta fase, se realizaron dos reuniones individuales con cada experta y una grupal. En la primera de ellas, se explicó el estudio y se les entregó el cuestionario para que lo cumplimentasen. En la segunda reunión, se recogió el cuestionario y se comentaron los resultados. En dicho cuestionario valoraron la pertinencia (grado en que contribuye a los objetivos que nos hemos planteado) y la adecuación (adaptado a los destinatarios) de cada uno de los ítems del instrumento. Aquellos ítems que obtuvieron una puntuación inferior a 3 en el apartado pertinencia se eliminaron y los que tuvieron puntuación inferior a 3 en la escala adecuación se reformularon.

Además, se recogieron sugerencias y aportaciones de nuevas competencias.

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En la última reunión, se comentó a las profesoras de forma grupal las aportaciones del resto de las compañeras, los resultados obtenidos y se discutió sobre la inclusión de los seis criterios nuevos aportados por las expertas.

Tercera fase: Envío de cuestionario al profesorado de Servicios Socioculturales y a la Comunidad.

El cuestionario, con las modificaciones realizadas en la fase anterior, se creó en formato electrónico utilizando la herramienta Google drive.

Dicho formulario se envió por correo electrónico a todos los centros educativos que imparten algún ciclo formativo de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad cuyo correo electrónico aparece en el Registro Estatal de Centros Universitarios no docentes, o en el Departamento de Educación del País Vasco y de Madrid. En total, se envió dicho cuestionario a 163 centros de toda España (excepto Cataluña por la dificultad para encontrar las direcciones electrónicas de los centros educativos): 3 de La Rioja, 22 de País Vasco, 6 de Aragón, 20 de Madrid, 7 de Asturias, 4 de Castilla y León, 6 de Murcia, 54 de Andalucía, 5 de Cantabria, 3 de Galicia, 2 de Castilla La Mancha, 3 de Extremadura, 10 de Valencia, 13 de Canarias, 4 de Baleares y 1 de Navarra.

Cuarta fase: Análisis estadístico de los resultados del cuestionario y cálculo de la fiabilidad del cuestionario mediante Alfa de Cronbach. 

La información contenida en los cuestionarios cumplimentados se exportó a una base de datos creada en SPSS v. 15.0 (SPSS Inc., Chicago, IL, USA), programa utilizado también para el posterior análisis de los datos.

Las variables continuas se expresaron como medias (y desviación estándar). Las variables categóricas se expresaron como proporciones.

El análisis de fiabilidad como consistencia interna del cuestionario se ha valorado a través del cálculo del Alfa de Cronbach.

Resultados y conclusiones

Validación del cuestionario de Competencias docentes en la familia de Servicios Socioculturales y a la Comunidad

El cuestionario fue sometido al análisis individual de los expertos. Entre las aportaciones realizadas, cabe destacar la eliminación de cuatro ítems y la inclusión de seis criterios nuevos.

Se añadieron al cuestionario, con un total acuerdo del grupo de expertas, los siguientes criterios:

  • Competencia didáctica: Tener actitud de reciclarse continuamente. 
  • Competencia intra e interpersonal: Adaptarse a las características del alumnado. 
  • Competencia trabajo en equipo. 
  • Respetar y aceptar las ideas del resto del profesorado. 
  • Vivir el conflicto como generador de situaciones nuevas que puedan ser de mejora. 
  • Competencia lingüístico-comunicativa: Comunicación cercana con el alumnado, pero estableciendo ciertos límites.

Cuatro ítems fueron eliminados por falta de pertinencia. Dentro de la competencia intra e interpersonal se eliminó el ítem “Orientar al alumnado” porque consideraron que es una función del equipo de orientación de los centros educativos. En la competencia trabajo en equipo se suprimieron los ítems “Dominar las técnicas de trabajo en grupo” y “Liderar el equipo de trabajo”, ya que consideraron que para trabajar en grupo no es necesario dominar las técnicas ni liderar el grupo, sino tener predisposición y una buena actitud. Y, por último, se eliminó el ítem “Prevenir problemas de voz” porque se consideró que no era una competencia fundamental del docente de Servicios Socioculturales y a la Comunidad.

Se valoró de forma positiva que el cuestionario tuviese que valorarse con una escala de 0 a 10, puesto que el personal docente está muy acostumbrado a dicha escala.

El cuestionario definitivo puede consultarse en el Anexo I.

Análisis de los resultados del Cuestionario Competencias docentes en la familia de Servicios Socioculturales y a la Comunidad.

El cuestionario Competencias docentes en la familia de Servicios Socioculturales y a la Comunidad fue enviado a 163 centros educativos de todo el territorio español, a excepción de Cataluña.

Respondieron al cuestionario 60 docentes, de los cuales el 80% eran mujeres y 20% hombres. La gran mayoría de los participantes eran trabajadores de centros educativos públicos, el 83,3%, el resto eran docentes de centros concertados. La media de edad fue de 45 años (9,3), la persona de mayor edad tenía 69 años y la más joven 26.

La mediana de años de experiencia fue de 12 años. La persona que menos experiencia tenía llevaba 1 año como docente de esta familia profesional y la más experimentada 50 años.

La Provincia de la que nos han respondido un mayor número de docentes es Madrid (15% de los participantes), seguida de Asturias, Guipúzcoa, Las Palmas, Navarra y Sevilla, con un 8,3%.

El análisis estadístico de las valoraciones realizadas por los docentes evidencia que la totalidad de criterios supera la puntuación media de 7; por tanto, se considera un instrumento válido para la evaluación de las competencias docentes de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad de Formación Profesional. Además, en el análisis de fiabilidad como consistencia interna del cuestionario, se ha obtenido un valor alpha de Cronbach de 0,96; lo que implica una significativa fiabilidad.

Las competencias más relevantes para los docentes consultados fueron: la competencia didáctica, la competencia intra e interpersonal y la competencia gestión de grupos de alumnos y alumnas.

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Los criterios que obtuvieron mayor puntuación son: Tener actitud de reciclarse continuamente (9,52); Realizar actividades de enseñanza-aprendizaje que acerquen al alumnado a su futura profesión (9,33); Favorecer un ambiente adecuado en el aula (9,33); Poseer habilidades emocionales y sociales (9,28); Tener actitudes de cooperación y colaboración (9,28); Mostrar sensibilidad hacia los problemas sociales (9,25) y Respetar y aceptar las ideas del resto del profesorado (9,25).

La actitud para reciclarse continuamente ha sido la competencia mejor valorada por el profesorado participante en el presente trabajo. Sin embargo, hay ocasiones en las que es complicado adquirir esta competencia puesto que, en la mayoría comunidades autónomas, la formación continua para estos profesionales es muy escasa; es difícil encontrar cursos de formación dirigidos al profesorado de FP y aún más difícil encontrar formación específica para la familia profesional Servicios Socioculturales y a la Comunidad. Como la formación presencial es escasa, se podrían plantear otras opciones aprovechando las oportunidades que nos brinda internet. Así, una opción interesante sería crear redes virtuales de aprendizaje, para  permitir a los grupos de profesores reunirse para hablar de su trabajo, aprender de otros y conducir temas curriculares y estructurales (Day, 1999; citado por Marcelo (2002)).

La segunda competencia más valorada ha sido “Realizar actividades de enseñanza-aprendizaje que acerquen al alumnado a su futura profesión”. Es lógica esta valoración, puesto que la finalidad de cualquier ciclo de Formación Profesional es preparar al alumnado para una actividad profesional y capacitarles para el desempeño cualificado de distintas profesiones. 

Los resultados también muestran la importancia que da el profesorado al trabajo en equipo, valorando con altas puntuaciones “Tener actitudes de cooperación y colaboración” y “Respetar y aceptar las ideas del resto del profesorado”. Este tema ha sido discutido en muchos estudios previos en los que se destaca el trabajo en equipo del profesorado como un aspecto muy positivo para toda la comunidad educativa, ya que es más efectivo y eficaz que la acción individual, permite analizar mejor los problemas y proporciona a los estudiantes una educación más coherente y de mayor calidad (Antúnez, 1999).

Poseer habilidades sociales y emocionales es otra competencia importante para favorecer un ambiente adecuado en el aula y saber adaptarse al grupo de alumnos y alumnas.

Y, por último, destaca la competencia “Mostrar sensibilidad hacia los problemas sociales” que podríamos afirmar que es la competencia más específica del profesorado de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad; puesto que el alumnado que realiza cualquiera de los ciclos formativos correspondientes a esta familia va a trabajar con colectivos vulnerables: menores, personas mayores, mujeres, personas con discapacidad física, psíquica o sensorial, inmigrantes y colectivos socialmente desfavorecidos.

En el polo opuesto encontramos aquellos criterios a los que los docentes les dan menor importancia. Las competencia peor valoradas son: la organizativa y de gestión del centro, la competencia en innovación y mejora (debido fundamentalmente a la baja puntuación obtenida en el criterio de investigación), y la competencia digital. 

En este sentido, los criterios con menor puntuación, por debajo de los ocho puntos, son:

  • En la categoría de Competencia digital: Diseñar y crear páginas web educativas (7,32); y Utilizar software específico para crear recursos y materiales (7,68). 
  • Dentro de Competencias organizativas y de gestión de centro: Actuar en caso de tener que poner en marcha un plan de autoprotección (7,44); Colaborar en la implantación o mantenimiento de los modelos de gestión de calidad en la educación (7,45); y Colaborar en la elaboración del Proyecto Educativo de Centro y de la Programación General Anual (7,82). 
  • En la Competencia de innovación y mejora: Realizar investigaciones en el ámbito educativo y/o social (7,73).

El tratamiento de la información y la competencia digital es una de las competencias básicas que contempla la ley educativa. Las Tecnologías de la Información y la Comunicación son un área prioritaria en los estudios de Formación Profesional, según el Real Decreto 1538/2006 de 15 de diciembre (BOE del 3 de enero de 2007). Sin embargo, actualmente hay un alto porcentaje del profesorado que no posee dicha competencia digital. En este sentido, en el cuestionario realizado, una participante que valoraba con menos de 6 puntos todos los criterios que forman la competencia digital, comentó “En asuntos de ordenador los alumnos están más al día y colaboran en beneficio de todos”. Considero que aunque el alumnado pueda colaborar, es necesario que el profesorado esté suficientemente formado para responder a sus demandas y para plantear actividades de aprendizaje acordes con la realidad que están viviendo, el cambio tecnológico ha sido muy grande en los últimos años y el profesorado debe estar actualizado para conectar con el alumnado y para conocer cómo se utilizan las TICs en los centros de trabajo.

Las Competencias organizativas y de gestión de centro se encuentran entre las peor valoradas, probablemente porque hay centros educativos en los que estas funciones las realizan fundamentalmente los equipos directivos.

El profesorado tampoco considera prioritario realizar investigación en el ámbito educativo y social. Sin embargo, muchos autores destacan la importancia de generar nuevos conocimientos y de realizar evaluaciones del aula y del entorno social para poder aplicar los mejores métodos de enseñanza-aprendizaje y estar al día de las investigaciones sociales.

Respecto a las sugerencias y comentarios realizados por el profesorado, me gustaría destacar la buena acogida que ha tenido el instrumento. Así, hay cuatro personas que quieren dejar constancia de la importancia de todas las competencias reflejadas en el cuestionario (“Veo prácticamente imprescindibles los ítems propuestos para realizar una tarea educativa que se adapte a las necesidades del alumnado y de la sociedad actual”) y de la importancia de realizar dicho cuestionario como medio de reflexión (“Una autoevaluación del docente realista y con intencionalidad de crítica constructiva debe ser una realidad en el trabajo de todo el personal educativo, impide el estancamiento y remotiva al educador, generando un aprendizaje continuo”.) Otra persona resalta la importancia de la práctica para desarrollar estas competencias.

La conclusión más relevante del presente trabajo es la elaboración de un cuestionario que plasma las competencias más relevantes para el profesorado de Formación Profesional, de la Familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad (Anexo I).

Además, se ha podido constatar la importancia que tienen estas competencias para profesores que trabajan actualmente en esta familia profesional.

Con este instrumento se pretende que el profesorado tome conciencia de las competencias que debe poseer para desarrollar su trabajo con calidad. Como afirman Medina, Domínguez y Ribeiro (2011:135):

“El profesorado ha de tomar conciencia del conjunto de competencias que le caracterizan y que la sociedad del conocimiento, las nuevas profesiones y la pluralidad social demanda, conscientes del papel cambiante y de las grandes demandas de los estudiantes, las organizaciones productivas y un mundo en transformación permanente. Así los modelos formativos serán más directos y han de plantear elementos acordes con el tipo de preparación que los estudiantes y la sociedad necesitan en este siglo; de acuerdo con el ritmo de cambio y de las respuestas que hemos de ofrecer, no sólo con legitimidad y gran fundamentación epistemológica, sino con nuevas evidencias de prácticas fecundas, y orientadas a la capacitación de los estudiantes y al desarrollo de las organizaciones”.


 

ANEXO I. CUESTIONARIO DE COMPETENCIAS DEL PROFESORADO DE FP DELA FAMILIA SERVICIOS SOCIOCULTURALES Y A LA COMUNIDAD

A continuación, se reproduce el cuestionario elaborado con google drive al que se puede acceder en la siguiente dirección:

El presente cuestionario pretende valorar la importancia de las diferentes competencias que debe poseer el profesorado de FP de la familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad

Cada competencia debe valorarse de 0 (ninguna importancia) hasta 10 (importantísima e imprescindible).

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Para contactar

Dirección postal: Paseo Santa Lucía 2 2º B, 31012 Pamplona (Navarra)

Teléfono: 658510488; Correo electrónico: ebujan@hotmail.com

PERFIL ACADÉMICO DE LA AUTORA: Elena Bujanda Sáinz de Murieta, Graduada en Educación Social por la UNED y Doctora en Farmacia por la Universidad de Navarra, con la tesis: Proyecto EDUMAY: Educación para la Salud en personas mayores residentes en los apartamentos tutelados del Ayuntamiento de Pamplona. Ha participado en varios proyectos de innovación educativa. Actualmente, trabaja como profesora de Formación Profesional de la Familia Servicios Socioculturales y a la Comunidad y es coordinadora de dos proyectos de salud europeos.

Fecha de recepción del artículo: 15/11/2016
Fecha de aceptación del artículo: 15/01/2017